El comienzo de nada

Primera Parte.

Un día como cualquier otro, en el centro del bosque más denso tuve curiosidad , la curiosidad hizo que me moviera y en ese momento empecé a existir , así como un iceberg empieza a existir cuando se desprende del hielo , así nací, de la nada y aunque sigo siéndolo soy algo diferente.

Lo que despertó mi curiosidad y me dio vida (si es que es vida) fue el ruido casi imperceptible de un pequeño caracol que en su lucha por seguir su camino movía las hojas una a la vez.
Decidí investigar y al ver sus atentas no pude contenerme y decidí entrar en él para saber que lo motivaba en su caminar, escondido entre su caparazón, entre su viscoso cuerpo, siento una determinación de dar el siguiente paso que ni Alenjandro Magno hubiera sentido jamás. No hay prisa , no hay miedo, no hay ambición , él solo sabe que tiene que dar el siguiente paso.

Algo lo detiene momentáneamente y lo hace cambiar de curso, pero la verdad no le importa mientras tenga donde caminar.

Decido salir a investigar que fue lo que detuvo a mi amigo el caracol y lo primero que percibo es un sonido dulce, relajante, claro, increíblemente llenante. Ya sé es agua.
Salto directamente hacia ella como para darme un chapuzón, lo cual es imposible puesto que no poseo cuerpo físico, al entrar en ella veo imágenes de miles y miles de kilómetros , de como el agua da vida a plantas, animales, energía; siento su poder , su fuerza increible, imposible de detener y a la vez tan humilde y delicada que cae de una hoja a otra sin lastirmas siquiera.

El sol calienta y nos evapora, dejandome llevar subo hasta lo alto de la nubes donde hace tanto frío que decido bajar con la lluvia y regocijarme entre rayos y truenos.

Pero, ¿qué este lugar donde fuí a dar? tantas construcciones , tanto movimiento, ya no estoy en mi tranquilo bosqué, me asusta y quiero volver pero otra vez me detiene mi insasible curiosidad, al ver estos seres tan llenos de sentimientos, emociones y pasiones siento deseos de quedarme.

Es definitivo voy a quedarme aquí un tiempo deseo entrar en ellos y conocer que los motiva, que sienten, que piensan.