Creando nubes

Cuarta parte

Escucho un ruido como el zumbido de una avispa mecánica y decido ir a investigar, al entrar en el pequeño apartamento percibo un olor dulce,verde y atrayente , en el fondo de la habitación una muchacha, a través de algún sortilegio, crea pequeñas nubes blancas y amarillas con sus manos.
Aquel olor proviene de los arbustos de su cabello, decido perderme en él como la chinita de la canción.

Al entrar en ella veo una curiosa escena, una joven frágil como una flor pero fuerte como Sansón, arrastra a su familia con una cuerda ni muy larga ni muy corta, su mirada llena de sueños se enfoca en su siguiente meta, no pierde la alegría en cada pequeño paso que da, unos para adelante otros hacia atrás, pero.. ¿cómo más se puede amasar el camino?.

Escapo a través de su risa de niña chineada. He de confesar que no me voy con las manos vacías, llevo bien escondido y atesorado aquel aroma que me encontró la primera vez.