
Yo siempre he sido fantasma aplicado , no soy esos que se dedican a hacer ruidos lejanos esperando que algún transeúnte los escuche y se asuste.
No, definitivamente ese no es mi caso , paso horas practicando los susurros más misteriosos , calculando el momento justo para solo me puedas ver solo con el rabillo del ojo, descubrí el punto perfecto de tu nuca donde nacen los escalofríos.
Pero el destino es un cínico que se burla de todos por igual y en lugar de terminar en un oscuro castillo o en aquella casa del barrio que todos temen , terminé en este supermercado abarrotado de gente, ayy pobre de mi....
Escuchen mi historia y juzguen ustedes sino soy el ser mas desdichado de este y el otro mundo.
Ayer utilicé toda mi astucia para botar aquella torre de latas de atún, me regocijaba la idea de ver el salto que todos darían al escuchar la bulla , pero lo único que gané fue una cara triste de un niño mientras sus padres lo regañaban por haber botado las latas.
A veces me acerco a las damas y soplo suavemente sobre su cuello y ellas responden "que bajo tienen el aire acondicionado aquí" , AIRE ACONDICONADO!!! es vergonzoso , hasta el fantasma de Canterville se burla de mi.
Durante una semana practique una risa macabra, grave y perversa. Esperé el momento indicado y con todas mi fuerzas la solté para que todos la escucharan, pero para mi mala suerte el encargado anunciaba una oferta de mayonesa en el pasillo "X", creo que le incrementé las ventas de mayonesa lizano ese día.
Soy un pobre infeliz que ni la muerte puede salvar.
Tan patética es mi situación que me reconforto cuando cambio los productos de pasillo y la gente se desespera porque no encuentran la pasta dental correcta.
Si alguna vez pasas por aquí, tan la caridad de asustarte al oír un susurro , o al menos date una vuelta por el pasillo de alimentos de animales, el cual he declarado mi cuarto privado ya que casi nadie va por ahí.
Atte
yoooooooooo